La lluvia cae sobre la ciudad, la noche me atrapa extrañándote mujer. Las gotas de agua resbalan lentamente por el cristal de la ventana, como lagrimas bañando tu rostro. Gotas de agua donde se refleja el rostro de mi amada esperando ese día en que decidas quedarte… Estos versos siguen su rebeldía vagando en mi mente. Las rimas… Están en huelga permanente. Amada mía me hace falta...