HIJO QUERIDO

¡Tú que en mi mente navegas,

hijo querido!

que en la noche me asaltas

en mi rostro desnudo

sobre la almohada.

En el amargo amanecer

del día que nace

en la espuma del café

donde los recuerdos, se esconden

de la noche trasiega.

Tengo miedo del recuerdo, camino solo

pensando en lo que he perdido

y en los posibles que fueron imposibles

aferrado a la necia esperanza

que vigila a la vuelta de la esquina.

¡Tú hijo querido!

que caminas en la distancia

y yo en la cercanía del olvido

arañando los días, en que tus manitas

pedían abrazos y daban caricias.

En la noche revuelta de los sueños, nado

 en las aguas turbias de los recuerdos del pasado

y tú hijo querido, sollozos y gritas

en el margen de ese río

donde la corriente me golpea.

Mis penas varias, en mi celoso recelo,

locuras me hablan de ti… hijo querido

escondiendo tu alma, mostrando tu sombra,

tus cosas nuevas

que me son extrañas.

 

Pippo Bunorrotri.

 

7 Comments
  • lynyo
    Posted at 18:28h, 22 febrero

    Profundo y maravilloso!

    • admin
      Posted at 21:17h, 22 febrero

      Muchas gracias ?

      • lynyo
        Posted at 22:38h, 22 febrero

        Un gusto

  • Alberto Blanco González
    Posted at 19:30h, 22 febrero

    ¡Ay! Los hijos. Son nuestra vida.
    Bonito.

    • admin
      Posted at 21:16h, 22 febrero

      ?☺️

  • Estrella RF
    Posted at 23:50h, 22 febrero

    Los hijos, nuestra alegría y nuestro dolor,
    pequeños dictadores a veces
    y otras duendes encantadores…
    Aunque se vayan nunca se van, siempre estarán en nuestro corazón.
    Un abrazo.

    • admin
      Posted at 23:52h, 22 febrero

      Cierto. Un abrazo