VIENES Y VAS

Vienes del planeta deseo

viajando en el tren de la pasión

donde todo pasa lento

y se va deprisa,

convertido en el anhelo

de dos sueños

que se encuentran en la utopía

de la supervivencia,

despertando de ese sueño,

de utopía de uno más uno

que son dos formando uno,

en la estación de la vida.

El tren su receso hace,

antes de partir de nuevo,

regresando con alegría

y pena cansada,

al planeta del deseo,

dejándote en el anden

de esa estación desconocida

con tus maletas repletas

de palabras y agonías.

Caminas por la Gran Avenida de la vida

que te enseña subsistencia

descubriendo la ciudad de tus días

dibujando palabras, tatuando agonías;

en el barrio de la inocencia

construyes tus fantasías,

en el de la alegría

su bullicio te enamora

con sus baterías,

en el de la tristeza

su amargura te golpea

llegando a parar tu fantasía.

Hay momentos que suman días

en los que vives sin vivir

sintiendo tu carne fría,

tu alma vacía,

donde la rabia te golpea

y el puñal de la palabra te hiere de muerte;

pero  lo mayoría de esos instantes

que el día te deja,

te los pasas escribiendo

en la cuartilla cuadriculada

el miedo que vives

creando miedo

de tu propio miedo.

Vas arrastrando tu angustia

en los palacios de cristal

donde todo se refleja

y se dividen en mil maneras

disfrutando de los placeres del destino

que ha traído en su viento,

emborrachándose del trajín

de cada día

que la vida te regala,

acallando los sombras

que te acompañan

recordándote esos miedos

por la vida.

Vas con tu maleta de palabras

pregonando tu sentir,

a quien escuchar quiera,

ese que escribes

en el diario de tu memoria

y que al abrirlo te recuerda

tu verdad y tu mentira,

lo que hace que tus pasos

en su adagio

cuenten sus agonías,

que escondes en el armario

del olvido,

del trajín de la vida.

Vienes del planeta del deseo

y te vas solo con tu mirada

en la oscuridad del firmamento

dejando tus maletas

repletas de palabras desgastadas,

perdidas y mudas,

y de agonías sufridas

en el caminar del sino,

dejando sin voz a tu sombra

mientras el tiempo

busca su propia voz

que un día fue la tuya.

 

Pippo Bunorrotri.

 

2 Comments
  • Winnie0
    Posted at 05:05h, 23 marzo

    Pippo…despertarme y leerte es un placer. Pensaba al unir las palabras de Vienes y vas (por cierto título perfecto) ¿pero esto lo escribe él? Si es ahora la descripción exacta de un «devenir que es mi vida ahora».
    Es calcado a mis sentimientos….y sypongo que a todos los que estamos en esta Gran Avenida con miedos…paradas…subidas y bajadas…agonias constantes…
    Gracias. Es pura poesia vivida.

    • admin
      Posted at 09:04h, 23 marzo

      Gracias ? por tus palabras, me alegra saber que mis versos producen tantas emociones… la vida es un carrusel de idas y venidas (en algún momento de la misma)… un abrazo ? poético querido