Son las veintiuna en el reloj, muere el aliento del día, nace la brisa de la noche y las sombras son figuras que caminan en la penumbra cargadas de reproches en la maleta de su alma, que despertaran de rabia en el lecho de los sueños donde cuerpo y alma se funden en uno pensando en...

Tú, poesía mía que en tus estrofas llevas un trozo del muro de mis lamentaciones y alguna que otra fantasía, que en el hueco de la rima que la retiene muere en los brazos del viento sin poder alcanzarla para que se queden en el recuerdo. Tú, que floreces en el etéreo espacio del abandono de las horas, siendo...