En el viento, el arpa reposada de mi corazón gime en silencio, anhelando la noche y el sueño tranquilo, para calmar el deseo de mi alma.   En la calma acelerada de la noche sin luna, sereno, desnude el alma inquieta, torturando con el pensar a la mente agitada, iluminando con su candil el tifón de tormenta del sentir apenado.   En esa noche de...