En aquel tiempo había un hombre llamado Alonso que habitaba un caserío situado en un valle, no lejos de Astorga una ciudad de mediana población que antiguamente había sido capital del reino, y antes incluso había sido campamento de las Legiones Romanas. ¿Quién había visto...

¡Por fin!. Tras tres  semanas  agotadoras  y  estresantes  de trabajo  en  el  estudio,  había podido  escaparme  de  la  agobiante  urbe  de  Madrid  para  descansar  en el viejo pazo familiar, una antigua construcción del siglo XV que siempre había pertenecido a mi familia y  que yo...