En la caverna de las horas que se acaban te mire a los ojos, a ti, verdugo! de la noche oscura y en ella hallé terror, asolación, sufrimiento, por lo que queda arrepentimiento por lo perdido en la duda del dolor por los sueños olvidados, por la vida apagada de la indignación del sentir y el olor nauseabundo del último suspiro inunda el viento de...