En el camino empinado de la vida, golpeado por el tiempo, siento la agridulce huella de mi atípico día que ha despertado entre los sueños robados de mi desvanecimiento donde perdí el ahora del reloj de mi tiempo.   En el flujo de ese desvanecer las horas del tiempo de recuerdo, palidecen en la memoria encontrando las cicatrices del latir de un...