14 Sep AÑORANZA
La añoranza es una melodía
en las cinco líneas horizontales
del blanco pentagrama de la sinfonía
de un compositor vació
sin memoria ni recuerdo,
que aparece de la nada
trayendo el quebranto
de la ausencia,
atenazando el corazón
derrotando al alma,
convirtiendo
en llanto y sollozos
el recuerdo.
Camina hacia los zumbidos
que se fueron en el velero
de un día de tormenta.
Camina hacia aquellos parques
que le enseñaron
los besos robados.
Camina hacia aquellas tardes de espera
en las que escribía las estrofas
de unos versos sentidos en la memoria,
y que nunca se atrevió a recitar.
A lomos del pensamiento
emprende un largo viaje
de regreso en el tiempo
con el eco distante en la galerna
del atardecer, de las campanas
de un campanario entre tinieblas
que marcan los tiempos
de esa amargura
que golpea la memoria
como si la vida fuese una novela
donde el fin de su historia
solo es la evocación
de un espejismo.
Camina pesaroso,
cabizbajo y pensativo
empelando la indiferencia,
meditando cada paso,
esos que ignoras
cuando la vida te persigue;
esconde la mirada
bajó los adoquines que pisa
porque tiene miedo
de abrir la puerta
del mañana.
El tiempo es esa partitura
que los años escriben
en el cuaderno de los días
donde el azar interpreta el destino
en el pestañeo del viento
y la añoranza es una de sus melodías,
convirtiéndote
en su compositor vació.
Pippo Bunorrotri.
dayansanz
Posted at 18:50h, 14 septiembreSublime.
admin
Posted at 21:44h, 14 septiembreMuchas gracias. Un abrazo
taboadama
Posted at 12:07h, 15 septiembrePrecioso
admin
Posted at 17:36h, 15 septiembreGracias. Un saludo