HIJOS

En los profundos surcos

de mi alma cincelada

por el tiempo tallado,

cohabitan,

cual mortíferas formas

el dolor  quemado

de vuestro recuerdo.

Hijos.

 

Porque como padre

no puedo odiaros

solo amaros puedo.

Hijos.

 

Vivís dentro de mi

como retratos olvidados

de mi frió corazón,

por lo que perdón pido.

Hijos.

 

Sois la memoria

que me acompaña

en los albores

de esta vida mía

desgastada

por los susurros y gritos

de unas voces añoradas.

Hijos.

 

Tras años de amargura

y de llantina decepción,

por construir

un sueño que se ha roto,

como cristal de borano.

 

He mirado con mis ojos

mas allá de mi tiempo

y allí estabais vosotros,

hijos,

dejando de ser dolor y recuerdo

porque entre nosotros

un nuevo amanecer alumbra.

Hijos.

 

Pippo Bunorrotri.

Tags:
No Comments

Sorry, the comment form is closed at this time.